Protección UV para la actividad cotidiana

COBCollection

Cristales, ropa y gafas – ¿Qué bloquea la luz UV? ¿Qué no la bloquea?
Siempre que salimos al exterior, estamos rodeados de rayos UV – incluso en los días nublados. Aunque la luz UV tiene efectos positivos, también puede hacer daño a nuestro cuerpo de diversas maneras. Por eso nos protegemos con gafas de sol y cremas solares. Pero, ¿qué bloquea realmente la luz UV? MEJOR VISIÓN responde a preguntas como: ¿Ofrecen los cristales o las ventanillas del coche una protección eficaz frente a la radiación UV? ¿Qué es más importante a la hora de seleccionar unas gafas con protección UV? ¿Si permanecemos en la sombra, reducimos nuestra exposición a la radiación UV? ¿Ayuda la ropa a proteger el cuerpo de los rayos UV y, de ser así, cómo?
Brilla el sol y en el cielo no hay una sola nube – en días así, muchas personas se ponen las gafas de sol y crema solar para estar protegidos durante el tiempo que pasan fuera. Pero la radiación UV no solo se encuentra en el exterior, bajo la luz del sol; los rayos UV también penetran el cristal de las ventanas. Aunque que la mayoría de las ventanas ofrecen cierto grado de protección, una parte de la luz UV perjudicial, la radiación UV, las atraviesa sin ningún problema. Puedes observar su efecto en la ropa que ha estado expuesta en un escaparate durante un largo periodo de tiempo: la luz produce su descoloración.
La mejor protección UV para sus ojos:
La luz UV puede dañar los ojos y la piel; y no solamente cuando hay sol pleno. Por eso, tanto las gafas de sol como las gafas oftálmicas deberían tener un filtro UV especial con protección de hasta 400 nm* para proteger eficazmente los ojos de la radiación UV. No obstante, con las gafas solares, no debe confundirse la protección UV con la protección antirreflejante; incluso las gafas sin un filtro UV reducen la intensidad de la luz solar y, por tanto, ofrecen protección frente a los reflejos del sol. Sin embargo, esta protección solo reduce el brillo de la luz solar, no el nivel de radiación UV. Los rayos UV no solo atraviesan la lente, sino que pueden llegar a causar más daño que sin las gafas. Las lentes oscuras hacen que la pupila se dilate, por lo que dejan pasar más cantidad de luz UV. Por lo tanto, asegúrese de comprar lentes solares con una protección óptima contra los reflejos solares y la radiación UV perjudicial. Cuando compre gafas de sol, asegúrese de que ofrecen protección UV de hasta 400 nm1. Si el vendedor de las gafas no puede darle información o solo datos imprecisos sobre el nivel de protección que estas ofrecen, no debería comprarlas.
La radiación UV en el coche o en espacios interiores – cómo debe protegerse los ojos:
La mayor parte de los vehículos solo ofrecen una protección UV parcial. Los parabrisas cuentan con un bloqueador eficaz de radiación UV que protege de la radiación UV A y B. Desde 1980, por ejemplo, el parabrisas frontal de un coche nuevo en Alemania está equipado con una película transparente que bloquea toda la radiación UV B y casi toda la A.

No obstante, esto no es suficiente para una protección UV completa en el coche: la mayoría de las ventanillas laterales y traseras no cuentan con ningún filtro UV para ninguno de las dos tipos de radiación UV. Por lo tanto, estas ventanillas sin protección pueden dejar pasar hasta un 80% de la radiación UV A. Los parabrisas tintados tampoco son un medio de protección eficaz porque solo filtran alrededor de un 40% de la radiación UV A. Siga leyendo más información sobre los distintos tipos de radiación UV

Por lo tanto, la radiación UV no es algo de lo que preocuparse solo cuando estamos disfrutando de un tiempo soleado en la playa – la encontramos prácticamente en cualquier lugar a cualquier hora del día. Las cremas solares y la ropa nos ayudan a protegernos frente a los rayos UV perjudiciales. Cuanto más denso sea el tejido, mayor es el nivel de protección – lo explicamos en mayor detalle más adelante. Sin embargo, sus ojos necesitan lentes solares u oftálmicas con protección UV.
¿Tenemos suficiente protección UV cuando estamos en la sombra?:
Si bien en la sombra hay menos radiación UV que a pleno sol, lo cierto es que incluso en la sombra puede alcanzarte hasta el 50% de la radiación UV perjudicial. Incluso es posible recibir una cantidad perjudicial de luz UV bajo un parasol o un toldo en un patio. Los edificios, el agua y la arena reflejan hasta un 85% de la radiación. La radiación UV penetra incluso la superficie del agua, así que debemos tener cuidado cuando nadamos a una profundidad de un metro porque la radiación UV tipo A puede tener una intensidad de hasta un 75% bajo el agua, y la de tipo B, de hasta un 50%. Asegúrese de protegerse el rostro y el cuerpo con una crema solar apropiada y resistente al agua. Puesto que existen distintos tipos de radiación UV y las personas reaccionan de manera distinta a ellos en función de su piel, existen cremas adaptadas a cada tipo de piel.
¿Qué tipo de crema solar es mejor para mí?:
La mejor protección solar dependerá de su tipo de piel y del periodo de protección solar propia de su piel. El «periodo de protección solar propia» se refiere a la cantidad de tiempo que su piel puede estar expuesta al sol sin quemarse. Las personas con la piel y el cabello claro (rubio, pelirrojo y castaño claro) tienen un periodo de protección propia menor que los que tienen la piel y el cabello oscuro (castaño o negro). Una persona de piel clara tiene un periodo de protección propia de unos diez minutos. El factor de protección solar (FPS) de una crema protectora indica cuánto tiempo puede permanecer al sol sin quemarse. Por ejemplo, una crema con un factor de protección solar de 30 incrementa el periodo de protección propia de la piel por 30, es decir, un periodo de protección propia de 10 minutos multiplicado por 30 ofrece protección durante 300 minutos o cinco horas; el periodo de tiempo que la crema protege su piel de las quemaduras solares.

Así puede determinar su factor óptimo de protección solar: divida el periodo de tiempo que quiera permanecer al sol por su periodo de protección propia para conocer el factor de protección solar (FPS) más apropiado para usted. Si una persona de piel clara con un periodo de protección propia de 10 minutos desea tomar el sol en la playa durante 150 minutos, un factor protector de 15 será suficiente.

También existen prendas especiales con bloqueo UV para nadar o pasar periodos más largos de tiempo en el exterior.


La ropa ayuda a bloquear los rayos UV:
La ropa es una buena manera de protegerse del sol en el exterior. Junto a un buen par de gafas de sol para proteger sus ojos, y una buena crema solar para proteger su piel, podrá disfrutar de una protección eficaz para todo el cuerpo – siempre que lleve la ropa apropiada. Si bien cualquier prenda protege de la radiación UV perjudicial, el nivel de protección que la prenda ofrece depende de dos factores: la densidad y el grosor del tejido. Puede guiarse por esta sencilla regla general: cuanto más denso sea el tejido, menor luz UV llegará a alcanzar su piel. Aunque las camisas de algodón o de lino son muy populares en días cálidos, ofrecen escasa protección solar puesto que dejan pasar gran cantidad de radiación UV. La ropa de fibras sintéticas como el poliéster ofrece una protección mejor porque pueden fabricarse y procesarse en tejidos más densos. La densidad de las fibras de algodón depende del propio algodón. Entre las fibras naturales, la seda natural ofrece un factor de protección UV más elevado: las fibras contienen componentes aglutinantes que reflejan y absorben los rayos UV. El «factor de protección UV» (UPF) indica el nivel de protección que ofrece una prenda con protección UV. Este le indica el tiempo que puede permanecer al sol sin sufrir quemaduras – lo mismo que con el factor de protección de una crema solar. Cuando compre ropa especial o bañadores con protección UV, asegúrese de que cumple con el estándar 801 además de comprobar su factor de protección solar. Esto garantizará que la ropa le ofrece la protección UV necesaria no solo cuando está seca y sin estirarse, sino también cuando está mojada y estirada sobre el cuerpo. De este modo, conseguirá bloquear eficazmente la luz UV en cualquier situación.